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martes, 10 de agosto de 2010

Contradicciones

Era una extraña contradicción la que surgía cada vez que volvía. Sí, le gustaba su presencia, y la consideraba una gran compañera y amiga, pero a la vez deseaba su partida. También, decir que les era innecesaria era una absoluta estupidez, pues sus poderes era una gran ayuda contra sus enemigos. Pero, aún así, cuando estaba cerca se sentía incómodo. Quizás era debido a los sentimientos que profesaba hacia él, o su mal carácter —del cual era diana—, o su debilidad. Era torpe, frágil y no siempre tenía los pensamientos donde debían estar. Sí, eso le irritaba, y mucho.

—Inuyasha —dijo Kagome—, ¿cómo es que estás tan callado?

También ese entro metimiento le resultaba innecesario y desagradable. No pertenecía a esa época, todos lo sabían, pero ninguno la quería dejar marchar.

Mejor amiga

- ¿Y por qué te iba a considerar mi mejor amiga?

+ Bueno, siempre estoy ahí cuando me necesitas. Salimos juntas, vamos a la misma clase, a comprar. ¿No soy tu mejor amiga?

- No, no te lo has merecido. Si sólo con eso bastase, más de la mitad de la gente que conocemos debería serlo. Para llegar a ser íntima, no sólo hay que estar en todo momento. Debes saber cómo soy, y tu no lo sabes. No sabes qué hacer cuando lloro, ni cuando me enfado. No aceptas mis críticas, ni me permistes ser yo misma.

+ ...

- No te confundas, te aprecio, pero te queda mucho por crecer y aguantar.

Yo misma

Me gusta el chocolate, el aguacate y el calimocho. También me encanta el power metal, bailar para para e ir a comprar libros. Disfruto de la compañía de mis amigos en todo momento, pues detesto la soledad. Sí, me es complicadísimo estar sola. Además valoro la sinceridad, la heterogeneidad y la capacidad de reír.

Soy extraña, peculiar. En una palabra: Cristina.

lunes, 9 de agosto de 2010

Lo misterioso

Una de mis múltiples dudas es, ¿por qué me atrae tanto lo misterioso? ¿Acaso lo difícil me resulta atractivo? Me pusieron muchas cosas en las palmas de la mano, pero yo no las quería, prefería aquello que tenía más lejos. Dichosa cabezonería.

sábado, 7 de agosto de 2010

La noche es larga

"La noche es larga", esas fueron las palabras de mi padre antes de morir. Y las de su padre antes de él, y así durante largas generaciones en las que el clan de los Buhos había existido. ¿Era un lema? ¿O quizás unas simples frases? Aun no se sabía, pero había llegado un punto en el que se nos relacionaba con aquellas palabras.

-¿Jairo? -oí a mis espaldas.

Me giré, y ahí, son una mirada que ablandaría al mismísimo Lucifer, se encontraba mi pequeña hermana. Tenía los ojos rojos de tanto llorar, y con largos ríos de lágrimas, ya secos, por su rostro. Estaba desaliñada, con el vestido sucio y el pelo enredado. Se fue acercando a mí, yo no había podido pronunciar palabra desde hacía días, temía que, al hacerlo, cayese en un penoso llanto.

-Jairo -volvió a decir mientras me abrazaba-, tienes que dormir.

viernes, 6 de agosto de 2010

Cuando alguien daña

No sabía qué pensar, ni qué desear. Estaba furiosa, quería la muerte inmediata de aquel individuo, ¿por qué? Fácil, cuando alguien daña a aquello a lo que más quieres, desearás todo aquello que juraste nunca pensar. Querrás cometer bandalismo, ser un asesino. Ella era mi amiga, mi mejor amiga, y tenerla entre mis brazos, llorando, para mí era el mayor de los pecados.
-No lo entiendo -me decía sollozando-, ¿por qué? ¿Nunca podré ser feliz?
La abracé, escudándola del mundo, evitando que mirasen ojos suspicaces y crueles. No podía hacer más.
-Lo serás, y no dejes que nunca nadie diga lo contrario. A diferencia de él, tu mereces la pena.
Palabras insignificantes llenas de sentimientos que, al menos por el momento, no iba a creer. Más nadie le echaría la culpa.